viernes, 27 de febrero de 2009

Mezzanine

Así es la vida del solitario...

llegando a la mínima dependencia, solo es importante lo que queda al alcancé de su mano en el escritorio, teclado, mouse, cigarro... cerrando el círculo a tales niveles, desligándose de las amistad, del sexo, del afecto.

Perfil controlador, todo debe resultar como queremos, y si la gente no funciona formando parte del plan, se prescinde de ellos.

Se siente un vació en lo lejano, tal como se siente el planeta flotando en el espacio inexplicablemente negro, más allá del ruido, de los murmullos, de la música y todo lo que intentamos ingnorar visualmente... podemos cerrar los ojos e imaginarnos flotando... no mas casualidades... no mas abrazos... la hora de meditación ha terminado.

Luego caminamos por la vida, mirando a la gente, desnudos, con ojos compasivos, nos olvidamos del egoísmo... entendemos la ley de la vida...

Pero no la comprendemos del corazón.

Nos tropezamos y nos sacamos la chucha de nuevo...
Gracias a la vida. Qué sería de nosotros si no fuera por nuestra amada maestra?.